Confitura de pimiento rojo

lista para degustar.... hoy con queso!

Como buena riojana, el pimiento está muy presente en mi cocina y además es que me gusta en todas sus variantes!! Frito, asado, relleno, en tortilla...vamos, que sí, que me gusta. Pero en especial siento devoción por el pimiento rojo. Cuando hace unos años una compañera de piso me enseñó esta receta no me podía creer dos cosas: 1. Lo increíblemente bueno que estaba aquello y 2. Que yo no la hubiera comido nunca! Así que la incorporé rápidamente a mis cocinillas y cada vez que la hacía pensaba en platos con los que pegaría. 

De todo con lo que he acompañado esta confitura, para mi la combinación perfecta es con tortilla de patata. La confitura de pimiento rojo es la corona a una tortilla de patata poco cuajada por dentro. Sublime. Otras opciones con las que cuadra bastante bien son el queso de untar o un buen filete. Si encontráis platos con los que case mejor, no dudéis en hacérmelo saber. Os dejo los ingredientes para que os salga un tarro mediano de conserva.

Ingredientes:

• 1 pimiento rojo
• 400 ml de agua
• 1 cucharadita de azúcar
• 100 ml de vinagre de vino (aunque también se puede hacer con otro)

Preparación:

1. Cortamos el pimiento en trocitos pequeños y lo echamos en un cazo. Añadimos el azúcar, el vinagre y el agua. Lo llevamos a ebullición y tapamos el cazo, bajamos el fuego a temperatura media y dejamos que se haga durante unos 20 minutos, con cuidado de que no se evapore el agua y se queme el pimiento. 

2. Transcurrido este tiempo, comprobamos que el pimiento está blando y el líquido se ha evaporado, retiramos del fuego y lo pasamos por la batidora. Si no es así, pues esperamos un poco más, o añades más agua para que termine de hacerse.

3. Es recomendable tomar esta confitura fría o del tiempo, así que si lo queréis comer en un plazo de 2 horas, lo mejor es enfriarla un poco metiendo el bote con la confitura en un recipiente con agua fría, y después en en congelador.

Que la disfrutéis!

Buen fin de semana!